Kinky boots

Y... Una solución creativa

Kinky boots es una película inglesa escrita por Geoff Deane and Tim Firth y está inspirada en una historia real. La cual, cuenta la historia de Charlie Price, el hijo de un fabricante de zapatos que se ve obligado moralmente a levantar la fábrica de zapatos de su padre recién fallecido.

¿Como se levanta una fabrica donde los procesos siguen siendo artesanales y tienen que competir con las grandes producciones industriales?

Si, lo primero que hace Price es despedir gente y rogar porque todo salga bien, pero después, se da cuenta que puede haber una solución… Cambiar de mercado. Dejar de competir con un productor insuperable y empezar a buscar nichos inexplorados, tal es el caso de los hombres que necesitan botas de tacón alto. Si, suena extraño, sobre todo porque la película se desarrolla en un pueblo conservador en Estados Unidos, yo incluso nunca me había preguntado como le hacen los Drag queen para usar zapatos de tacón y es que nuestros cuerpos son muy distintos, el peso que debe cargar un tacón para un hombre es mucho mayor que para el de una mujer.

Pero para Price nada fue imposible y junto con Lola, la drag queen en quien se inspira para su cambio de mercado, empiezan una linea de botas de tacón para drags, la cuál quieren llevar a Milan a un desfile de modas.

Price cambia totalmente con el concepto que manejaba su padre, el cuál ya era obsoleto, logra encontrar un mercado, que no importando que fuera pequeño, le garantizaba clientes cautivos.

Su producto es innovador y de alta calidad, Price logra modernizarse y usar las cosas a su favor.

¿Qué es lo que podemos aprender de esta película? 

Que siempre es importante innovar, darnos cuenta de las necesidades de nuestro entorno y ser creativo a la hora de buscar soluciones, nunca dejar que las puertas se nos cierren.